Hoy, día 5 de junio celebramos el Día Mundial del Medio Ambiente con el lema: “Restauración de la tierra, resiliencia en la sequía y desertificación”

• En los últimos 3 años, el Institut Guttmann ha reducido, con todas sus actuaciones, un 22,74% las emisiones de CO2 a la atmósfera, una acción equivalente a plantar 723 árboles.
• Las medidas de responsabilidad medioambiental de los centros de Badalona y Barcelona abordan la sostenibilidad desde todos los ámbitos: reducción de recursos hídricos, consumo eléctrico y emisiones de CO2, arquitectura sostenible y segregación de residuos, entre otros.

 La huella climática del sector salud equivale al 4,4% de las emisiones globales, equivalente a las emisiones anuales de 514 centrales eléctricas de carbón. Algo que no deja de ser paradójico, teniendo en cuenta que sostenibilidad y salud están intrínsecamente relacionadas. Por este motivo, la responsabilidad medioambiental es uno de los pilares de la gestión del Institut Guttmann, que aplica una cultura de la sostenibilidad con medidas en numerosos ámbitos: reducción de recursos hídricos, consumo eléctrico y emisiones de CO2, arquitectura sostenible y segregación de residuos, entre otros. Todo ello hace que, entre otros objetivos, la organización haya reducido sus emisiones de CO2 un 22,7% en los últimos 3 años, junto con un 8% de reducción del consumo de agua.

“Reconocer que el cambio climático afecta a la salud de la población es un acto de responsabilidad que el Institut Guttmann asume como uno de los objetivos prioritarios para los próximos años, asumiendo el reto con una actitud proactiva”, expone Montse Caldés, directora gerente y co-directora del Institut Guttmann.

Las cifras hablan por sí mismas

De 954,56 toneladas de CO2 emitidas en 2020, a 737,49 en 2022, el equivalente a plantar 723 árboles. Esto se ha logrado mediante actuaciones en todos los ámbitos relacionados con la sostenibilidad. Entre 2021 y 2023 se han instalado 608 placas fotovoltaicas que hacen que el 20% de la energía consumida en el hospital provenga del autoconsumo; la sustitución de la iluminación tradicional por LEDs ha reducido en un 71% la potencia de estas luminarias, y el uso de vehículos híbridos y cargadores ha permitido ahorrar 1,6 toneladas de CO2.

“La promoción de la movilidad sostenible, además, es un factor transversal que va más allá del ahorro energético –explica Caldés–. Por ejemplo, la aplicación de un programa asistencial de Consolidación Territorial evita desplazamientos innecesarios de los pacientes y sus familias al hospital y acercamos el tratamiento y la rehabilitación, en lo posible, a centros cercanos a su domicilio. De esta forma estamos impactando en las emisiones pero también en el ahorro de recursos económicos y de tiempo, y poniendo en el centro el bienestar de pacientes y familias”, continúa.

En cuanto a los recursos hídricos, las medidas implementadas (grifos con sensor, cubiertas térmicas para evitar la evaporación...) han ahorrado 6.000 m3 de agua en 3 años, lo que equivale a la capacidad de 2,5 piscinas olímpicas . Actualmente se segregan 30 tipos de residuos diferentes con el uso de una compactadora y contenedores específicos, entre otras medidas.

La política ambiental forma parte de la cultura institucional y propicia un desarrollo de nuestra actividad, siempre teniendo en cuenta la protección del entorno y procurando conseguir la máxima eficiencia en el uso de los recursos naturales. De hecho, fue una cuestión muy presente ya en 1993, cuando se empezó a plantear el diseño del hospital de Badalona y que continuó con la inauguración del nuevo centro de Barcelona, ​​en 2019. Ambos edificios están diseñados con criterios de sostenibilidad, con una reducción del consumo de climatización, el aprovechamiento de luz natural con grandes ventanales, cubiertas sostenibles con grava por el aislamiento térmico y el uso de materiales respetuosos que requieran un mínimo mantenimiento.

El Institut Guttmann cuenta con las certificaciones ISO 14001 de Gestión Ambiental, ISO 50001 de Gestión Energética y el Reglamento europeo EMAS, y en 2022 recibió la distinción de mejor proyecto de Greenest Hospital in Europe 2022, otorgada por la Unión Europea de Hospitales Privados y el Premio al Mejor Hospital Sostenible Nacional 2011 de los Premis Best in Class. Asimismo, el edificio de Guttmann Barcelona, ​​situado en el barrio de La Sagrera de Barcelona, ​​cuenta también con la certificación BREEAM y la calificación energética A. Por su parte, el hospital de Badalona utiliza sistemas ecológicos de limpieza y mantenimiento del sotobosque con ovejas, reduciendo el uso de maquinaria y evitando emisiones a la atmósfera. También dispone de jardines terapéuticos dotados con vegetación autóctona y sistema de riego por goteo programable y sectorizado. Esto ha permitido reducir un 14% el consumo de agua de riego en los últimos 5 años.

Cuidamos de las personas, protegemos el planeta.

Todas estas medidas, afirma Caldés, "forman parte de una cultura institucional que defiende que la sostenibilidad no es algo sólo medioambiental, sino que debe impregnar todas las actuaciones desde el punto de vista de la gestión". Esto implica promover la sostenibilidad institucional en todas sus vertientes: medioambiental, social, económica y cultural.

Así, como institución saludable, el Institut Guttmann articula su compromiso en torno a tres ejes que integran la responsabilidad con el medio ambiente pero también el compromiso con el bienestar de las personas y la humanización de la gestión. Esto se traduce, entre otras medidas, con la promoción de hábitos saludables, poniendo el énfasis en el cumplimiento de la normativa de un entorno libre de humo, la nutrición equilibrada y el beneficio de un entorno natural saludable, así como en la confortabilidad de las instalaciones y la creación de un entorno laboral inclusivo, ético y responsable, donde la igualdad, comunicación efectiva y desarrollo profesional son claves.