Después de una lesión medular, la estancia en el hospital no sirve sólo para la rehabilitación física y psicológica del paciente, sino que se prepara lo que vendrá cuando la persona vuelva a casa. Pero existen casos en los que, por motivos diversos, se necesita una intervención más personalizada que no se podría desarrollar de forma óptima con un ingreso hospitalario.
Conoceremos a Ana, que desarrolló una lesión medular como consecuencia de un proceso oncológico, y escucharemos como un equipo de enfermería, terapia ocupacional y enfermería trabajaba en un programa de rehabilitación en su casa para que pudiera ser lo más independiente posible.