Un consorcio catalán, liderado por el Institut Guttmann, destina 1,16 millones de euros en innovación en el tratamiento de pacientes con salud mental y daño cerebral
Un consorcio catalán, liderado por el Institut Guttmann, destina 1,16 millones de euros en innovación en el tratamiento de pacientes con salud mental y daño cerebral
Un consorcio catalán liderado por el Institut Guttmann ha introducido nuevas tecnologías como la inteligencia artificial, el vídeo digital interactivo o la neuromodulación en tratamientos de rehabilitación y estimulación cognitiva de pacientes con daño cerebral. Este proyecto se enmarca en la Comunidad RIS3CAT Nexthealth, impulsada por ACCIÓ - la agencia para la competitividad de la empresa dependiente del Departamento de Empresa y Conocimiento de la Generalitat de Catalunya- y coordinada por Biocat.
La iniciativa forma parte del proyecto Innobrain, en el que también participan las empresas y centros tecnológicos o de investigación Starlab, SKY & EARTH, Eureca, el Instituto de Investigación en Inteligencia Artificial, el Centre de Visió per Computador, la Corporació Sanitària Parc Taulí de Sabadell, el Institut d’Assistència Sanitària de Girona (IAS), la Fundació Salut i Envelliment de la UAB y el Institut d’Investigacions Biomèdiques August Pi i Sunyer. El presupuesto del proyecto, de 1,16 millones de euros, está cofinanciado por el Programa Operativo FEDER de Cataluña 2014-2020.
A lo largo del proyecto, que se ha desarrollado durante 3 años, se ha investigado la introducción de tecnologías para mejorar la rehabilitación de pacientes con daño cerebral, demencias o trastornos psiquiátricos y definir tratamientos más personalizados. Según el director de Investigación del Institut Guttmann, el Dr. Josep M. Tormos, Innobrain parte de la premisa de que "si lo estimulamos correctamente, el cerebro puede modificar su actividad y funcionamiento para recuperarse de un daño que ha sufrido; el 60% de los pacientes que siguen un entrenamiento cognitivo mejoran su recuperación". Según el Dr. Tormos, "el reto es ayudar el 40% restante para que esta ratio pueda incrementarse y por ello es necesario definir la estrategia adecuada para introducir las nuevas tecnologías en estos tratamientos".
En este sentido, el Consorcio ha trabajado para incorporar las nuevas tecnologías como elementos para la estimulación cognitiva de estos pacientes. Así, el proyecto ha trabajado en la aplicación de la inteligencia artificial para crear modelos de predicción y de prescripción que permitan mejorar la personalización de los tratamientos y el seguimiento continuado de la evolución de los pacientes. De este modo, se ha trabajado en la combinación de algoritmos de aprendizaje automático para recoger datos de los pacientes tratados con anterioridad y extraer información que permitan elaborar hipótesis terapéuticas que se validarán en los tratamientos sucesivos para el beneficio ofrecido a cada nuevo paciente. "En el marco del proyecto, hemos avanzado en estrategias para mejorar el conocimiento que nos facilitan los datos obtenidos con estas tecnologías para generar evidencia para la práctica clínica de manera que se puedan mejorar los algoritmos de ayuda a toma de decisión médica", asegura el Dr. Tormos.
El consorcio de Innobrain ha combinado también otras tecnologías, como la introducción de un sistema para monitorizar la actividad cerebral de los pacientes mediante el electroencefalograma (EEG). Esta solución permite cuantificar de manera objetiva cambios en la actividad cerebral consecuencia de la rehabilitación cognitiva para poder determinar su eficiencia en la mejora clínica de los pacientes. Esta tecnología se ha combinado también con la integración de vídeos digitales interactivos en 360º para desarrollar escenarios virtuales de rehabilitación cognitiva en los que los pacientes desarrollan actividades de la vida cotidiana como parte de su tratamiento.
Actualmente el Institut Guttmann ha empezado a introducir estas tecnologías en pacientes que han sufrido un ictus o enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson, así como trastornos como la esquizofrenia o la depresión, entre otros. De hecho, el Institut dispone de su propia plataforma de telerehabilitación cognitiva, Guttmann NeuroPersonalTrainer®, para pacientes neurológicos y psiquiátricos.