Ayer se celebró la VIII Jornada de Educación Vial bajo el título "Conducción y prevención de los accidentes. Un aprendizaje necesario a lo largo de la vida", que como ya es habitual reunió a más de un centenar de personas relacionadas con la prevención de los accidentes de tráfico: policía local, Mossos, monitores Game Over, formadores, autoescuelas, mutuas y responsables del Servicio Catalán de Tráfico, entre otros.

Este año, el debate era especialmente necesario dadas las cifras de incremento de la siniestralidad en las carreteras y muy especialmente el número de víctimas mayores de 60 años. Por este motivo, el debate de la jornada giraba en torno a la necesidad de aprender y formarse a lo largo de toda nuestra vida a fin de mantener las capacidades cognitivas de nuestro cerebro en el mejor estado posible y así poder garantizar, en la tamaño de lo posible, una conducción más segura y evitar los accidentes.

La jornada, inaugurada por el Dr. Josep M. Ramírez, director del Institut Guttmann y el Sr. Juli Gendrau, director del Servicio Catalán de Tráfico contó con la conferencia inaugural del doctor en Biología y profesor de Genética de la Universidad de Barcelona, ​​David Bueno quien explicó cómo la neurociencia nos ofrece claves para incidir de manera positiva en la configuración de nuestro cerebro para hacerlo más plástico y receptivo a los nuevos aprendizajes. "La clave está en tener un cerebro activo, ponerle retos, porque es esto lo que favorece las conexiones neuronales que son las responsables de un mejor rendimiento".

El Dr. Ramírez incidió en la necesidad de una evaluación de las funciones cognitivas para asegurar qué elementos como la memoria sostenida, la memoria dividida o la atención son fundamentales a la hora de predecir nuestro comportamiento al volante. Es por eso que es importante disponer de herramientas para evaluar y tratar estas capacidades por lo que ha pedido la colaboración del Servicio Catalán de Tráfico. Por su parte, el Sr. Gendrau, defiende estas tareas de prevención y aprendizaje como "lluvia fina" contra los accidentes en las carreteras y asegura que las medidas impulsadas hasta ahora en otros colectivos, como los jóvenes, se traduce con resultados positivos en las carreteras.

En la última edición el programa Game Over ha llegado a cerca de 50.000 escolares de 496 centros catalanes de ESO y Bachillerato y según los resultados de las encuestas, más del 50% de los jóvenes reconocen que han cambiado ciertas actitudes tras las charlas testimoniales de los monitores.